Si no eres amante del gimnasio, puedes dedicar diariamente 15 minutos, entrenando en tu propio hogar. Bajarás una talla, sólo en un mes.

En forma sin pisar el gimnasio

Ya no tendrás excusas. Si no te interesan asistir al gimnasio puedes ponerte en forma sin necesidad de salir de la casa. Interésate en elegir ejercicios que sean eficaces. ¿Cuál es la hora más conveniente? Muy temprano, en la mañana. Luego de una ducha, inicias el día toda plena de buena energía.

 Rutina infalible para hacer en casa

Realizarás tres ejercicios que te ocuparán unos 15 minutos. Los combinarás con paseos diarios. Paseos diarios de media hora van a ayudarte a bajar dos kilos sólo en un mes. Además, lograrás tener unas piernas y brazos muy firmes.

  • Sentadillas. Siéntate en una silla, con rodillas paralelas a tus talones. Luego, apoyando bien los pies levántate, al mismo tiempo que contraes los glúteos. Haz como si fueras a sentarte nuevamente, hasta rozar el asiento con los glúteos. Levántate nuevamente. Hazlo en 4 series, con 15 repeticiones. Puedes intercalar cada una de las series, realizando en el sitio carreras de 30 segundos.
  • El «burpee». Se le conoce también como el “soldadito”. De cuclillas apoyándote en las puntas de los pies, apoyando en el suelo las palmas de las manos, empieza a saltar llevando las piernas hacia atrás hasta poder llegar a plancha. Flexiona los brazos, de nuevo a las cuclillas, salta hacia arriba. Vuelve a posición inicial. Repite nuevamente el ejercicio. Haz 2 series con 5 repeticiones.
  • Los «lunges». Con este ejercicio se trabajan los glúteos y las piernas.  El esfuerzo requerido es poco. Se da un paso grande hacia atrás con solo una pierna hasta casi colocarla “de rodillas”. Mientras tanto, la otra pierna, delante permanece en ángulo recto. Se hacen 3 series con 10 repeticiones para cada pierna.

Otros consejos

Toma en cuenta algunas claves para acertar en la meta de ponerte en forma:

  • Iniciar poco a poco. No agotarse desde el inicio. Es más efectivo y saludable para el cuerpo el aumento progresivo en el ejercicio.
  • Ser constante. La constancia da como resultado la formación del hábito. Una vez que te haces consciente de la importancia del ejercicio y lo saludable que es para ti, vas incorporando esta rutina a tu vida.
  • Un cambio a la vez. Incorporarás la rutina del ejercicio. Luego, no al mismo tiempo, trabaja con la alimentación adecuada y saludable. No cambies todo al unísono.
  • Mantén el ánimo. Cuando comiences a notar la efectividad de la nueva rutina puedes atreverte a buscar más… zumba, kik boxing, pilates… Experimenta, prueba y quédate con aquello que más te agrade. Si lo que estás haciendo te emociona, entonces, funcionará.

La música te pone las pilas

Es un elemento muy motivador para ponerte en forma. Para acelerar los movimientos puedes elegir el pop, techno o rock. Si la música, al hacer los ejercicios, nos agrada sentimos que el esfuerzo físico es menor.